Sobró casi todo.
La cena puesta pero nos dedicábamos a alimentarnos con la mirada, a devorarnos con los ojos.
Comíamos por necesidad, para descansar de atendernos. Bebíamos para eliminar la sequedad de boca de tanta charla y nervios que no significan reparos ni desconocimiento, sino algo bueno e inexplicable.
Sólo el tiempo es corto en todo esto, tan sólo es poco el recuento diario de horas, minutos y segundos, es mínima la separación entre el momento del encuentro y estas líneas. Todo lo demás es exceso y confianza.
Parece que fue hace mucho. Pero fue hace poco. Eso lo hace también especial, lo que ha sido y lo que parece.
Desde el momento de levantarnos sabíamos lo que iba a pasar. Nos mirabamos sin decir nada. Muchas veces lo mejor se dice sin decir nada. Seguro que alguna gente también nos miraba aunque nosotros no veíamos a nadie más, solo veíamos lo que se veía venir.
Sin resistir más, la luz se apagó y los ropajes que tan solo nos adornan cayeron al suelo arrugados, como avergonzados y tímidos ante tanta belleza. Ya sólo nos arropábamos los dos... para qué queríamos más?
Y la humedad impuso su ley...
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It's amazing how you can speak right to my heart,
without saying a word, you can light up the dark.
Try as I may I could never explain
what I hear when you don't say a thing .
The smile on your face lets me know that you need me,
there's a truth in your eyes saying you'll never leave me.
The touch of your hand says you'll catch me whenever I fall.
You say it best when you say nothing at all...
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2 comentarios:
el sergio ha mojado, el sergio ha mojado...
yours,
k.
Qué poco romanticismo... con lo precioso que me ha quedado el momento... jajajajajaj
Never yours,
S.
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